El estatus de la fragmentación y conectividad en la zona de interés
Las perturbaciones producto de la actividad humana en los ecosistemas o paisajes naturales tienen a menudo, como consecuencia, la disminución de la superficie forestal en forma fragmentada. La fragmentación debe entenderse como aquel proceso en el que áreas de vegetación forestal reducen su extensión territorial al dividirse en zonas o parches más pequeñas por la acción de un agente externo para dar lugar a zonas de uso agrícola o en general de actividad antrópica.
Al hablar de zonas fragmentadas se introduce de manera natural el concepto de conectividad entre dichas zonas, donde entendemos conectividad como el proceso opuesto a la fragmentación, es decir, se define conectividad como aquel paisaje que facilita o impide la movilidad o desplazamiento de especies entre parches de zonas boscosas. La alta o baja conectividad la determinan dos procesos, uno estructural y otro funcional. El proceso estructural es geográfico, lo que nos permite elaborar mapas que representen índices o grados de fragmentación y conectividad, determinar la superficie de los parches y la distancia lineal entre dichos parches. El proceso funcional de la conectividad se refiere a la respuesta conductual de las especies en el paisaje y responde directamente a factores topográficos como la pendiente, el relieve y factores climáticos como la nubosidad y tipo de suelo.
En selva Lacandona se encontraron entre 2017 y 2018 17330 parches donde el más grande presenta una superficie de 64,300 hectáreas mientras que el más pequeño 0.008 hectáreas.
Los nodos implican los polos donde la distancia lineal euclidiana es mínima para el tránsito de especies entre parches y se calcula de manera.
Las capas calculadas permiten estimar el nivel de conectividad entre los diferentes parches de vegetación leñosa / boscosa.
Se presentan 4 métricas en la herramienta:
Parches
Voronoi
Links / Enlaces
Nodos
Hay varias métodos y gráficos de paisaje, para nuestro análisis acá presentada nos enfocamos en una sola forma de gráfico de paisaje; gráficos que modelan las relaciones entre parches de hábitat. Nos referimos a estos como "gráficos basados en parches" para mayor claridad. En estos modelos, los parches de hábitat definidos para una especie focal (Fig. 2-1, a) se distinguen de la matriz (Fig. 2-1, b) y sirven como los nodos (también llamados vértices; Fig. 2-1 c). Las conexiones entre nodos, llamados enlaces (también llamados bordes; Fig. 2-1, d) sugieren el potencial de movimiento o dispersión de una especie focal. En la aplicación más común de gráficos basados en parches, los enlaces representan la distancia geográfica entre los nodos, y los nodos están conectados por enlaces solo cuando esta distancia está por debajo de un umbral de movimiento ecológicamente relevante para el organismo. Los grupos de nodos conectados se denominan componentes (figura 2-1, e), y esto implica que un organismo que habita cualquier nodo (es decir, parche) dentro del componente puede potencialmente moverse o dispersarse a cualquier otro nodo en el mismo componente. Los nodos que no tienen enlaces a otros nodos también se consideran componentes (Fig. 2-1, c). Un compartimento es otro término para un grupo de nodos conectados, pero generalmente se aplican criterios más estrictos para la pertenencia a un grupo (por ejemplo, una alta densidad de enlaces entre nodos como se muestra en la figura 2-1, f). Para definiciones y discusiones más formales de las propiedades gráficas.
Ilustración 7: Ilustración de términos clave en gráficos basados en parches
(a) Parche - el hábitat focal en el paisaje; (b) Matriz: el paisaje que excluye los parches, que se muestra aquí como una superficie punteada y un río de color sólido; (c) Nodo: el elemento gráfico utilizado para representar el parche; (d) Enlace: el elemento gráfico utilizado para representar la relación de conectividad entre parches; (e) Componentes: grupos de nodos conectados por enlaces; (f) Compartimento: un grupo de nodos identificados de acuerdo con algún criterio; Este compartimento se ha identificado en función de la densidad de enlaces entre nodos y es parte de un componente más grande. (g) Nodo de corte: un nodo que, si se elimina, desconectará un componente; (h) Enlace de corte: un enlace que, si se elimina, desconectará un componente.
Ilustración 8: Conectividad según tamaño de parche, calculado usando el mapa MADMEX 2018 con base en Sentinel-2
El producto muestra una alta conectividad para el gran parte de la zona de interés cual apoya también la existencia y residencia de especies de mamíferos y aves grandes que requieren de un hábitat intacto y conectado. Pero también vemos que hay principalmente dos frentes en la región, una del noroeste que entra en la zona dividiéndole en 2 a 3 parches grandes y una del sureste que está comiendo el parte sur aún más intacto.
Resultados
En la Tabla 1-1 se resume el número de parches de vegetación natural encontrados tanto para 2017 como 2018. Además se muestra la extensión del parche más grande y del más pequeño para cada año. En este estudio un parche de hábitat consiste en el píxel central con sus cuatro vecinos si son del mismo valor. Los polígonos de Voronoi son polígonos alrededor de cada parche de hábitat. Éstos se definen desde los bordes de los parches en distancia euclidiana. En cuanto a los enlaces, se consideraron aquellos que forman un gráfico plano mínimo. Esta topología se configura a través de polígonos de Voronoi alrededor de cada parche de hábitat. Las distancias son distancias euclidianas.
Año |
Cobertura |
Parches |
Área parche más grande [ha] |
Área parche más pequeño [ha] |
2017 |
Boscosa |
17330 |
794409.04 |
0.01 |
2018 |
Boscosa |
13862 |
825239.28 |
0.01 |
Tabla 1-1. Tamño de parche en Selva Lacandona para los años 2017 y 2018.
Incendios detectados
En el segundo trimestre de 2019, en el mes de Abril, se detectó un área de cambio debido a un incendio. Estos datos son consistentes con lo reportado por la página de monitoreo de puntos de calor para esas fechas. (Figura 2-2.)
Figura 2-2. Detección de cambios en el segundo trimestre de 2019 debido a un incendio aproximadamente a 15 kilómetros al Este de la Laguna Miramar.
Mapas trimestrales de cobertura de suelo con una exactitud estadística arriba de 96% para la máscara binaria bosque/no-bosque. Una exactitud general arriba de 88% tomando en cuenta las 7 clases antes mencionadas y superior al 70% para cualquiera de las mismas.
Mapas trimestales de cambios en cobertura de suelo, cartografía binaria: cambio/no-cambio en cobertura.